martes, julio 18, 2006

David González

El ojo de cristal

mi amigo aún no había cumplido seis años
cuando un gato, su propio gato, le arrancó
un ojo.

se lo sustituyeron
por uno de cristal.

mi amigo cumplirá treinta y dos la próxima semana,

y ya nadie, pero nadie,
ni siquiera él mismo cuando se mira en el espejo,
es capaz de diferenciar

la mirada
de un ojo

de la mirada
del otro.

No hay comentarios: